Wednesday, December 16, 2009

Sobre el deseo

Qué bueno que Patricia de Souza acaba de escribir una entrega sobre el deseo. Ella me redime cuando en un relato/post anterior uno de los personajes sale huyendo porque se sintíó muy vulnerable. Aprecien por ustedes mismos lo que ella dice:

Leyendo un dossier sobre el Deseo, en el Magazine Littéraire, encuentro una idea que me parece interesante: el gran reto ahora con el deseo no es transgredir ninguna regla (quedan muy pocas, y la transgresión, como la comprendía Bataille, o antes, Sade, es ahora un mito) sino mantenerse a la altura de su deseo. La mayoría de personas manifiestan un sentimiento de culpabilidad por no haber respetado su deseo. Y creo que es cierto que ahora, nos cuesta, saber cómo llegar a estar en acuerdo con él. Hay relaciones que sabemos desaprovechadas porque el miedo, la impaciencia, han sido las peores consejeras. Así la mujer que conoce a una persona interesante, siente miedo y se aleja para no someterse a esa prueba y viceversa, el hombre. Es todo un reto seguir su deseo, y es agotador desalienarlo, cierto. Pero no valdría la pena? es decir, como cuando vamos a una fiesta y queremos ser espontáneoas y decidimos jugárnosla de alguna forma para estar más cerca de nosotroas... No creo que haya falla en esto, seguirse, es encontrarse con quien debemos encontrarnos. Son algunas ideas que me vienen espontáneamente leyendo este informe interesantísimo.

9 comments:

Sheila said...

Los seres humanos para poder ser dignos hijos de la sociedad en que vivimos, debemos acallar muchas veces nuestros deseos. No estoy hablando del deseo de comerse un helado, o del deseo de hacer lo que se desea cuando se dispone del dinero. Estoy hablando de esos deseos recónditos en nuestras almas, de esos que a veces nos convierten en "pecadores". Otras veces ni siquiera es por el pecado. Hay quienes no tienen ninguna traba real para dar rienda suelta a su deseos, sin embargo son esclavos/as de "lo correcto", del "no debo", etc.

Fernando said...

Pues todo parece indicar que transgredir esas reglas y dejarse llevar por esa fuerza interior y en contra de esas ideas de culpa producen una mejor realización de nosotros mismos que si nos restringimos...
El único inconveniente que yo encuentro de mi parte es que se necesita un cómplice para hacer esas cosas, otra persona que esté dipuesta a correr el riesgo y llevar a cabo la "apuesta" como dice De Souza.

Anonymous said...

¿qué reglas? en qué contexto? bajo qué condiciones? quién? cuándo? cómo? dónde? pa qué?

((- Pelutxa niña, vete a jugar a mister Sherlock a la terraza, preguntooonaaa
-juuuurrrr, son preguntas científicas, que además también se hacen los escritores que lo he leído y oido
- Nada como una gata ilustrada-ilustrándose, andeluego.... ))

;-)

Sheila said...

No creo que siempre se necesite un cómplice para vivir como se quiere, para convertirse en un/a transgresor/a. No toda transgresión tiene un matiz sexual. A veces el deseo puede ser sólo salirte del molde, no hacer lo que todos esperan de acuerdo a tu edad, género o estatus social, y para eso no siempre se necesita un cómplice.

Fernando said...

En este caso hablamos del deseo que sí tiene un matiz sexual y va en la misma dirección en que lo plantea Patricia de Souza.

En la contraportada de su libro Erótika se puede leer esta presentación de Cristina Rivera Garza:

"Aquí el placer no es una maldición, sino reconocimiento; no es culpa, sino libertad. En estas páginas lo sexual posee un brillo lunar y es el origen de esa voz irreverente y sugestiva que dice: 'Aquí estoy, no tengo miedo, sigo mi deseo' ".

Anonymous said...

pues chico, pa qué le das tantas vueltas post tras post últimamente?... síguelo sha de una dita vez!! xD

Maribel said...

Sobre el deseo dejo una cita de OSHO:

¿Por qué se ha enamorado de ti? Si puede enamorarse de ti, ¿por qué no va a pensar en otros? Esa posibilidad permanece abierta. ¿Y cómo va a arreglárselas si ve pasar a alguien guapo y surge en ella el deseo? Incluso decir "Este hombre es guapo" es desear: ha entrado el deseo. Solo dices que algo es bello cuando sientes que es digno de ser poseído, de ser disfrutado. No eres indiferente.

Fernando said...

Maribel te saliste de tópico. Ese no era el punto discutido aquí...
Sé que te encanta irte por donde no es pero te voy a recordar cuál era el punto señalándote la parte de Patricia de souza que es relevante:

"Hay relaciones que sabemos desaprovechadas porque el miedo, la impaciencia, han sido las peores consejeras. Así la mujer que conoce a una persona interesante, siente miedo y se aleja para no someterse a esa prueba y viceversa, el hombre"

Maribel said...

Bueno, tú siempre dices que yo leo muy literal y yo leo el título del post y sobre eso me inspiro,otras veces me inspiro en alguna frase del post (aunque luego se diga que eso es sacar de contexto algo).

Sobre lo que citas de Patricia, he de decir que como mujer nunca me ha pasado, pero sí he visto como se alejan muchos hombres por miedo cuando conocen a una mujer (no estoy hablando sólo de mi misma en la parte que me corresponde como mujer, lo he visto en otras mujeres y otras relaciones).

Y si alguna vez me vuelvo a salir del tópico o me voy por donde no es me lo dices para que me pueda dar cuenta y matizar.

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