Sunday, April 18, 2010

Los blogs y Darwin

Una segunda entrega del significado de escribir es necesaria para describir y explorar la razón que puede animarnos a continuar con un acto solitario (como diría Patricia de Souza) como ese de externar pensamientos, ideas y vivencias a través de la escritura, muy a pesar de que los lectores escasean, muchos bloggers abandonan y la actividad le cede paso a otras alternativas más de moda y que implican menores grados de dificultad.

Porque la verdad hay que decirla y cada vez que nos enteramos de que alguien deja de publicar, escribe de manera cada vez más espaciada o en el peor de los casos anuncia su retiro de manera definitiva, se produce una especie de malestar, un vacío que se siente casi igual como cuando se nos va un amigo del barrio, un compañero de trabajo o perdemos una amistad entrañable. Ese resultado lo obtenemos casi por igual ya sea la persona muy conocida de nosotros de manera directa o la conozcamos a través de terceros o por referencias. Y a la vez se nos hace difícil evitar sentir esa sensación de tristeza, de estar quedándonos solos, desiertos y aislados de la realidad. Parecería como si de pronto hacer esto careciera de todo mérito e importancia. El desaliento de algunos pudiera ser algo contagioso.

Pero para mí sí que esto es importante y por ello trato de racionalizar y entender el porqué cada vez somos menos o se acorta el tiempo de permanencia en esta actividad que aunque no tiene fines de lucro, tampoco nos cuesta un centavo y nos sirve, nos ayuda muchísimo a mantenernos activos y críticos con lo que sucede a nuestro alrededor.

Sin ser ideas muy descabelladas, las teorías de Darwin podrían proporcionarnos cierta claridad.en lo que estaría ocurriendo con algunos blogs. Si estamos en lo cierto, sólo los más fuertes sobrevivirán y los más débiles no le quedará otro camino que el de desaparecer (¿para bien de todos los restantes?). Nos duela o no, porque en la desaparición se cuentan blogs amigos y blogs amigos de amigos, el hecho es que aquéllos cuyas bases no hayan estado bien cimentadas pues parecen no tener mejores alternativas.

¿Quién puede mantenerse haciendo algo que en realidad no le gusta demasiado o lo hace por estar a la moda, o para satisfacer una necesidad momentánea de buscar notoriedad y/o llamar la atención?

Cuando nuestros gustos y preferencias no se alinean con eso que realmente hacemos o pretendemos hacer se produce una tensión que con el tiempo crece y llega un momento que se vuelve insoportable y evidentemente un rompimiento, una separación y hasta una explosión no son difíciles de predecir. ¿No es eso lo que vemos en los matrimonios, cuando los participantes no pueden mantener la misma dirección del barco y hay que partirlo o hundirlo porque la tripulación no se pone de acuerdo y quiere dirigirlo hacia destinos opuestos y aún si quisieran ponerse de acuerdo la nave ya no sirve o los vientos ya no le son favorables para poder dirigirla a puerto seguro?

9 comments:

Sheila said...

Buenos argumentos. ;)

Argénida Romero said...

Interesante...me dejo pensando en muchas cosas y me alegro por otras.

Querido, Darwin, hasta en esto :)

Sonia Tejada said...

Interesante Fer, le doy muchísimo crédito al que bloguea, de manera consistente, sobre un tema/área por años. No tengo idea de cómo se hace eso.

En mi caso, el blog ha pasado por todas las etapas que he pasado yo: tristezas, alegrías, crítica de cine/literaria, crítica social y política, estados melancólicos, de rabia, de frustración... pérdidas, una dolorosa separación, amores frustrados... y aunque a veces pienso que mi blog ha perdido el norte, no dejo de escribir porque para mí el único norte que debe tener mi blog es el de la expresión personal, ya sea en sentido, social, político, literario o simplemente emocional.

No creo que el mantenerme en la blogósfera sea tanto cuestión de ser más fuerte que los que se han ido, sino -en el mismo sentido darwniano que apuntas- la clave es el poder adaptar el blog, no tanto al medio o a la moda, sino al sentir propio -a nuestros intereses y necesidades. Es obvio que vamos cambiando, y si se pretende mantener un blog anclado en la rigidez de lo que fuimos, o escribíamos hace cuatro años - y que ya no nos motiva o no necesitamos, entonces la alternativa de cerrar es una opción válida y tal vez necesaria.

En estos cuatro años vida bloguística -lol- he visto irse a amigos queridos, y yo misma he contemplado la idea -aún no la descarto. Sin embargo, mi blog se ha convertido en una extensión de mí... Y aunque los temas que trato sean más personales, y llamen menos la atención de los lectores, no por ello son menos válidos para mí, porque siempre que escribo me sale de del corazón... La escritura debe ser genuina... y los blogs a veces se prestan para crear una persona desconectada del propio ser, y nada más... y se hace difícil mantener esa pose por años.

En conclusión y de manera muy personal -y por lo tanto, muy poco científica- la clave es adaptar tu blog a tu ser del momento en que escribes... Escribe de lo que te de la gana, pero últimadamente de lo que sientas, y de lo que ocupe tus pensamientos; y siempre siento lo más sincero y auténtico posible.

Tu post está excelente :).

todavia said...

Pienso que la inmediatez de Twitter y su brevedad es muy atractiva. Ahí no se necesita ni pensar mucho ni cuidar lo que se va escribir, simplemente su publica y ya. 140 caracteres es la mediad ideal para que no se note que no teniamos nada que decir (aunque tambien podria ser un reto interesante comunicar cosas importantes en tan solo unas palabras, la trsite realidad es que, leyendo twitter, es obvio que no es este el caso la mayoria de las veces)

Mi temor es que los blogs se queden tan desiertos que al proveedor del servicio le sea mas sencillo cerrar estos espacios que mantener los pocos blogs que quedan. ¿Podriamos continuar escribiendo si no existieran sitios como Blogger o Wordpress? ¿Tendríamos la disciplina de continuar aunque no fuera por medios digitales y no exitiera la posibilidad de que alguien nos leyera?

Coincido con los comentrarios anteriores: Muy buen post.

Argénida Romero said...

No creo que uno tenga que complicarse tanto. El blog es una herramienta, igual que una hoja en blanco o una màquina de escribir. La utiliza quien siente la necesidad de esa herramienta para el fin que entienda pertinente.

El medio es medio, el fin es fin. No le veo otra utilidad a mi blog. Antes escribìa en cuadernos y en una època enviaba reflexiones o poemas a un grupos de amigos vìa e-mail, bajo el nombre de El diario de la Rosa. Cuando conocí las bítacoras simplemente hice una transición.

Les recomiendo este artículo: http://orsai.es/2008/11/una_charla_sobre_la_muerte_de_los_blogs.php

Fernando said...

Es agradable tener a Sheila, Argénida y Sonia comentando en un mismo post. Más aún si tenemos invitados como "todavía" que le añaden plusvalía a lo que se dice por aquí.

Sonia ilustra de manera perfecta cómo un blog puede sobrevivir a los cambios. Un blog no debería ser otra cosa que la extensión de nosotros mismos. Si nosotros cambiamos y siempre lo hacemos, el blog debería también reflejar esos cambios.

La fortaleza de uno se reflejaría en la medida en la que le damos cabida y aceptación a las dificultades que surgen en nuestro camino exponiendo nuestras debilidades y al mismo tiempo dejamos que ellas formen parte de nuestro quehacer cotidiano y así lo expresamos en ese instrumento, en esa herramienta como bien dice Argénida.

Es cierto que el medio y el fin deberían ser cosas distintas pero no hay que olvidar que a veces se entremezclan y se confunden de la misma manera que la iglesia es tanto la feligresía que se congrega como también el edificio que los alberga y sirve no sólo para adorar a Dios como también a otros propósitos como bien hemos comprobado últimamente.

Insisto, estoy más que encantado de verlos a todos por aquí...

Fernando said...

Argénida, está muy bueno el artículo que recomiendas. Y vaya qué coincidencia pues mi entrega final (me obligas a divulgarla pues era un secreto) estará orientada en la misma dirección en la que ahí se señala.
¡Ya lo verás!

Sheila said...

Creo que si, Fernando, que los blogs evolucionan en la medida en que lo hacemos sus hacedores. Yo lo he sentido. Me pongo a revisar temas viejos, y pienso ¿Y esa era yo? En muchos temas me he expuesto, he dejado ver mis debilidades, mis tristezas, mis rabias.

Luna Quisan said...

Hola Fer, perdón por la ausencia y el silencio. Un fuerte abrazo, paso de rapidin, pero aqui sigo.
Prometo escribir pronto. :)

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