Monday, March 31, 2025

Gratitud o reconocimiento?

 La gente dice que hay que ser agradecido y dar gracias por todo. No estoy totalmente convencido de eso porque da la impresión de que el agradecimiento es un razonamiento, una decisión que se toma. Por el contrario, a mi entender, agradecer es sobretodo un sentir, una emoción o sentimiento producto de una interacción con otros y el mundo.

De la manera que lo veo yo, sería una hipocresía agradecer cuando no se siente el deseo de hacerlo. No obstante creo que aunque el agradecimiento no es una obligación ni tampoco debe ser una imposición, se puede, en su lugar, hacer reconocimientos. Puedo reconocer que algo que una persona hace es digno de admiración o emulación pero no necesariamente ello tiene que cambiar el cómo me sienta con relación a ella.

Creo que es muy importante hacer la distinción porque muchas veces los motivos por los cuales las personas hacemos las cosas que hacemos no es primariamente para beneficiar a terceros (aunque eventualmente ello se consiga) sino para satisfacer debilidades personales o llenar huecos en los caracteres individuales. Visto así, no tengo que sentirme agradecido hacia alguien que al hacerme un favor lo hace no tanto por ayudarme sino para satisfacer su vanidad o porque espera algo a cambio.

Si las personas esperamos una retribución por las cosas que hacemos, entonces esas acciones se convierten en una transacción y le quitan mucho el mérito que intrínsicamente podrían merecer. En mi manual de principios uno debe hacer favores por el placer que da el hacerlos y sin esperar nada a cambio incluyendo en eso el agradecimiento mismo. Por lo tanto si el hacer favores es un placer en sí mismo entonces nadie le debe deber nada a nadie y quien los haga con ese propósito queda descalificado de recibir mayores recompensas.

Thursday, February 27, 2025

Hay que ser justos

 Estoy reevaluando esa norma o propensión nuestra que se extiende tanto a nivel personal como también social e institucional, de juzgar a los demás por su peor conducta o sus peores errores sin tener en consideración los elementos atenuantes en su favor.

La historia de las personas es muy compleja y está matizada por muchas circunstancias en las cuales ellas desempeñan tanto roles positivos como negativos. Lo justo sería no juzgar los individuos no sólo por las características adversas que poseen sino también por los aspectos positivos con los cuales han contribuido y se han destacado en su relación con los demás.

Dicho de otro modo, las personas no son ni buenas ni malas del todo. Hay que ser justos y decir que todo el mundo tiene sus momentos buenos y también sus malos. Juzgar a los demás únicamente por los sinsabores que nos hicieron pasar sin tener en consideración sus aportaciones y los buenos ratos es talvez un tanto injusto.

Ciertamente pasar balance de la vida de una persona es más fácil cuando ya no existe. Mirando hacia atrás, en retrospectiva, se pueden ver más claros los puntos salientes que la caracterizaron tanto en su favor como en contra.

Hacer esas reevaluaciones no significa necesariamente que hay que ir a correr a restablecer relaciones con las personas que por una razón u otra ya no forman parte de nuestras vidas. Aunque nuestras susceptibilidades con el tiempo cambian, hay que dejar la vida correr su curso sin detenerse y no se puede volver atrás a tratar de arreglar situaciones o corregir cosas que uno cree podrían estar ya superadas.

En fin, tampoco hay que olvidarse que las fricciones y desacuerdos que inevitablemente produce la interrelación de las personas son también catalizadores que ayudan a las personas a ponerse en movimiento, permiten el que no se queden estáticas y ayudan a buscar nuevas alternativas más favorables en otras direcciones y en ese sentido se justifican en sí mismas.

Friday, January 31, 2025

Siendo uno mismo

 He estado pensando sobre lo bien que se siente cuando se llega a cierta etapa de la vida en la que sin hacerle daño a nadie, uno deja de preocuparse de vivir para guardar las apariencias y se puede dar el lujo de ser uno mismo sin temor al qué dirán. Es genuinamente agradable llegar a ese punto en nuestro recorrido donde sin sobrepasar los límites racionales, lo que piensen los demás no nos produce muchas cosquillas ni llega a importarnos demasiado como para quitarnos el sueño.

Creo que ahora mismo estoy en ese estado o estoy muy cerca de conseguirlo. La liberación ha tomado su tiempo y creo que los beneficios superan los inconvenientes. Me siento más libre de expresar mi forma de ser y pensar y puedo evitar aquellas interacciones que no me producen el mínimo de placer.

Puedo decir entonces que soy un ser humano más libre pues ya no siento la necesidad de ocultar la insatisfacción que me producen ciertas compañías humanas y trato de evitar hacer muchas otras cosas que no producen un mínimo de alegría y bienestar.

Soy más consciente de lo que ocurre a mi alrededor y creo que es una pérdida de tiempo enfrascarse en la lucha inútil de aclarar todo para quedar bien o tratar de explicarlo todo con el fin de satisfacer costumbres sociales.

En fin quería decir esto aquí para que quede constancia en alguna parte de mi situación emocional y mental en este primer mes que termina del año 2025. 

Hallelujah!


Powered By Blogger